Red Automática de Vigilancia y Control de la Calidad del Aire
La Red Automática de Vigilancia y Control de la Calidad del Aire de Cantabria se creó en 1991. Constaba de tres estaciones de medida gestionadas por el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU).
En 1998 la Red fue cedida al Gobierno de Cantabria, quien encomendó su gestión al Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), organismo autónomo dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Urbanismo, efectuándose la ampliación y modernización de la Red.
Actualmente la Red consta de once estaciones fijas y una unidad móvil.